La devoción de Hernán Cortés: la Inmaculada.





La devoción a la Inmaculada Concepción en la Calle Real de Castilleja de la Cuesta  se  remonta  hasta  los  años  en que  llegaron los  frailes  franciscanos,  tomando la  capilla  de  ese lugar.  Ellos  ya  se  habían situado en  otra parte  de España, pero  hicieron un cambio con los  cartujos.

LA INMACULADA  CONCEPCION DE  CASTILLEJA

La imagen con la  que se  empezó a  venerar es  una  pequeña  talla de finales  del siglo XV o  principios  del XVI, ya  que posteriormente  sería  sustituida  por  una  más  grande.  La  capilla  tenía una  pequeña  ventana  por  la  cual todos los  peregrinos o  transeúntes  que  pasaban por  ese  camino  podían venerar  a la  Inmaculada.

Cerca de  la  capilla  se  encuentra una  casa que  fue  del jurado Juan Rodríguez, amigo de don Hernán Cortés.  Es muy  probable  que  este  lo visitara  y pasara  por la  iglesita  de  la Inmaculada.  Se  sabe que  el conquistador  de  México  ingreso con un estandarte  de la Inmaculada. 

Este  estandarte  mantiene  el patrón que los  artistas de  la  época  manejaban con esta  creencia. Puede  notarse las manos  juntas  y el manto colocado de  igual manera  que la Inmaculada  del monasterio de  Granada (Patrona oficial de  España) que  también es de  ese  siglo.

Del conquistador  de México se  sabe  que  era  un gran devoto de  la Inmaculada, llamándola “Conchita”,  fundando y perteneciendo a  varias  cofradías  de  dicha  advocación. 

A  causa  de  su estado se  traslada  a  la  propiedad  de  su amigo  Rodríguez  en la  villa de  Castilleja de la Cuesta, donde  cambia  su testamento.  A los  62  años  muere  en esa  casa y la el cuerpo  pasa  a la  Iglesia de la Inmaculada  Concepción donde  se le  dice  una  misa.



Luego se  traslada  hacia  el  lugar  del sepelio en  el monasterio de  San Francisco. De  ese  sentimiento expresado durante  toda  su  vida  a la Inmaculada y por  haber  pertenecido a diversas cofradías  de  esta  advocación, se  afirma que  también debió pertenecer  a la de Castilleja, y contagiar  a muchos  otros  de  sus  compatriotas  para  que  estando en diferentes ciudades  llevasen en cada  nuevo lugar la  devoción a  la Inmaculada. 


Bibliografía

https://sites.google.com/site/fundacioncallereal/Home/presentacion/historia/historia-de-la-calle-real/6-hernn-cortes-y-la-calle-real

http://www.rafaes.com/html-2004/exposicion-inmaculada-castilleja-mercantil-2013-b.htm